Cuando pensamos en téAlguien lo relaciona con Japón, otro con Inglaterra, otro con China, y algunos de nosotros con el frío o incluso con el calor. Se puede beber esta maravillosa bebida aromatizada durante todo el año. Ni siquiera importa el motivo, sino simplemente disfrutar de una taza de té.
"Si tienes frío, el té te mantendrá caliente. Si tienes calor, el té te refrescará. Si estás deprimido, el té te animará. Si estás excitado, el té te calmará". - William Gladstone (estadista y político liberal británico)
¿De dónde procede el té?
El origen del té está envuelto en mitos y leyendas. Desde emperadores chinos hasta princesas portuguesas, la historia del té es tan rica como su sabor. Se cree que el té verde se originó hace 5.000 años en China. En aquella época, la avanzada civilización estaba gobernada por un emperador llamado Shen Nung. Exigió que se hirviera el agua potable por motivos de salud.
La leyenda del viaje del emperador chino
Un día de viento, cuando el Emperador se detuvo con su séquito para descansar y refrescarse, un par de hojas secas de un arbusto cercano cayeron en su taza de agua hervida. El agua adquirió un color marrón oscuro. El Emperador no quiso probarla inmediatamente, sino que primero se la dio a probar a algunos de sus soldados y esperó el resultado. Quedó fascinado por el fuerte olor y finalmente probó él mismo la nueva bebida. El emperador chino quedó encantado con el aroma, y pronto sintió el refresco, que le gustó. Y así, cuenta la leyenda, se bebió la primera taza de té.
La magia del té verde y su preparación
Al principio, el té verde se preparaba de una forma completamente distinta a la actual. Las hojas de té se cocían al vapor, se amasaban en el horno, se hacían pequeños ladrillos y se secaban. Esos "ladrillos" de té se cocinaban después junto con arroz, jengibre, sal, piel de naranja, especias, leche y, a veces, cebolla. Esta forma de preparar el té existe aún hoy en Mongolia y el Tíbet.
Los monjes japoneses trajeron el té de China a Japón a principios de la Edad Media. Inmediatamente se convirtió en la bebida favorita de sacerdotes y aristócratas. La preparación del té era característica de la época de la dinastía china Sung. Después de moler las hojas de té en pequeños molinos de piedra, el polvo de té se vertía sobre agua caliente y se mezclaba con un pequeño batidor de bambú. Basándose en este ritual, los japoneses elaboraron más tarde su ritual especial de beber y preparar té. Desde entonces, el té verde ha experimentado una gran popularidad en Japón y se ha convertido en una tradición social semirreligiosa.
En Japón, aún hoy, hay escuelas donde los niños aprenden las técnicas de preparación y servicio del té verde. Siglos después, el uso de esta planta se extendió y se popularizó mundialmente. Así, a los turcos les gusta beber té negro, al igual que a los indios, con la diferencia de que ellos suelen tomarlo con leche o diversas especias aromáticas.
Si la historia es maestra de la vida, nos muestra claramente que el té es una bebida especial y beneficiosa. El té era adorado por los emperadores, bebido por los nobles, pero también por la gente corriente. Se libraron batallas por esta bebida milagrosa. Y, por último, hoy en día podemos elegir entre diferentes mezclas y sabores de té. Sólo tenemos que decidir cuál se adapta mejor a nuestros gustos...
Pocas reglas sobre cómo beber té verde para obtener lo mejor de él:
- No añadas el té verde directamente al agua hirviendo, ya que se pierden sus beneficiosas catequinas.
- No lo descafeines, porque la descafeinación afecta más a los nutrientes del té verde.
- Añade limón a tu té: ayuda a absorber algunos de sus nutrientes.
- No seas tacaño. Opta por el mejor. - contiene más nutrientes
¿Cuál es el mejor momento para tomar té verde?
Cuando se trata de beber té verde, algunas partes del día son más óptimas que otras.
Bebe té verde entre las comidas: Una taza de té verde entre comidas le sentará muy bien. Beberlo unas dos horas antes o después de una comida ayudará a maximizar la ingesta de nutrientes y la absorción de hierro de la dieta.
Beber té verde antes del entrenamientoComo ya sabemos, el té verde puede acelerar nuestro metabolismo. También puede darte un subidón de energía por su contenido en cafeína. Todo esto lo convierte en una bebida estupenda para probar justo antes de hacer ejercicio.
Y deberías nunca beba té verde que se haya dejado reposar toda la noche. Esto puede favorecer la proliferación de bacterias y moho, que pueden causar graves problemas de salud. Además, el té empezará a perder su sabor.
Datos curiosos sobre el té verde:
¿Sabías que la popularidad del té verde tiene su origen en una resaca muy fuerte? Sí, aunque no lo creas, fue hace siglos, cuando un shogun de Japón llamado Sanetamo (1192 - 1219 d.C.) sufría una resaca tan terrible que todos a su alrededor pensaban que estaba a punto de morir, hasta que un monje llamado Myoan Eisai le preparó un poco de té y le salvó. Después de eso, Sanetamo se convirtió en un aficionado al té y empezó a difundir el té verde por todo Japón.
Así que, si todavía no tienes una bolsita de té verde en algún lugar de tu cocina, después de esta historia, ¡deberías intentar conseguir alguna! Y, para aquellos a los que no les entusiasme su sabor pero quieran disfrutar de sus beneficios, existe otra opción: los suplementos de extracto de té verde.
"Como nos lavamos con agua por fuera, así nos lavamos con té por dentro". - viejo dicho chino
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